El ex presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y su esposa Laura, colocaron este martes la primera piedra del edificio que albergará la Biblioteca Presidencial “George W.Bush”, en el campus de la Universidad Metodista del Sur (SMU), en Dallas.
Fuera del recinto, un centenar de personas protestaron contra la figura del ex presidente estadounidense y mostraron su indignación ante la construcción de un complejo cultural con su nombre. Los manifestantes portaban pancartas exigiendo el arresto de Bush por su responsabilidad en las invasiones y la matanza de civiles en Afganistán e Irak.
En plena crisis capitalista, se prevé que el complejo, que acogerá una biblioteca presidencial, un museo y un instituto político, cueste más de 300 millones de dólares.
El conjunto de edificios, que estará ubicado en el lado este del campus de la SMU, abarcará una superfície de 20.900 metros cuadrados e incluirá un edificio de tres pisos con una réplica de tamaño natural de la Oficina Oval.
El complejo contará con un ”Salón de la Libertad”, la “Plaza Libertad”, una sala de exposiciones, un restaurante, aulas, salas de investigación, oficinas, salas de reuniones, un auditorio y una suite presidencial.
Según Mark Langdale, Presidente de la Fundación “George W. Bush”, “todas las bibliotecas presidenciales destacan de una manera muy única, dado que representan la personalidad del presidente que estas exhiben”.
“El presidente Bush deseaba un edificio muy discreto y accesible”, dijo Langdale.
“Bush cree que la libertad es un regalo universal de Dios”, dijo Langdale, y agregó que “ese es el mensaje que quiere transmitir el edificio”.
Al acto asistieron ex colaboradores de Bush como la ex secretaria de estado Condoleezza Rice.
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